La moraleja del cuentito del gato con botas ¿Cuál es?
Si no hicieron la tarea del miercoles pasado de leerle el cuentito a un hij@, a un niet@, a un vecin@, a un sobrin@, a un ahijad@, les invito de vuelta.
El cuentito termina bien. Cuando el protagonista está maldiciendo su suerte por haberle gustado tener la herencia de su hermano: "la casa, los txantxos, los bienes...", en vez de, el miserable gato que le había tocado. El lindo gatito le pide que le acoja, que le reciba, que le deje que le acompañe.
Entonces el protagonista le acepta, lo recibe. Y cuando lo hace, cambia su suerte porque a través del gato y sus artimañas y estrategias hace que pueda conocer una joven dama rica con la que pueda casarse.
La moraleja del cuentito es que cuando uno acepta su "aguijón" el que fuere, su "debilidad", algo cambia. El ingenio y la creatividad agudizan las ESTRATEGIAS del AMOR para cambiar las situaciones, movilizan las virtudes (esa palabra totalmente en desuso y con mala fama).
La ACEPTACIÓN da eso, que es diferente de la RESIGNACIÓN, ya lo decía San Pablo. Me fue dado este aguijón, "Rogué tres veces al Señor que me fuera quitado, no me fue quitado, pero me dijo: Te basta mi gracia, porque mi fuerza se manifiesta en tu debilidad".
¿Cuál era ese aguijón? Los estudiosos en la biblia se matan, se queman la cabeza, dejan años de su vida para intentar averiguarlo: "una enfermedad, el orgullo, etc..." ¿Mi opinión, y la de otros?: "El tiempo es demasiado precioso como para gastarlo es eso, hay demasiada necesidad... Eso no es lo importante, lo esencial. Y ya puestos...Un viejo refrán dice: "la curiosidad mató al gato".
¿Qué es lo esencial? ¿qué es lo importante que nos deja San Pablo, la Tradición, la trasmisión de la fe?
El AMOR. La educación sexual en el contexto del amor. AMORIS LAETITIA. La alegría del amor.
AL 282."Una educación sexual que cuide un sano pudor tiene un valor inmenso, aunque hoy algunos consideren que es una cuestión de otras épocas. Es una defensa natural de la persona que resguarda su interioridad y evita ser convertida en un puro objeto. Sin el pudor, podemos reducir el afecto y la sexualidad a obsesiones que nos concentran sólo en la genitalidad, en morbosidades que desfiguran nuestra capacidad de amar y en diversas formas de violencia sexual que nos llevan a ser tratados de modo inhumano o a dañar a otros".
Esto del "pudor" que san Juan Pablo II desarrolló en sus catequesis de los miércoles, y que después se recogieron en un el libro "Hombre y mujer los creó", yo tuve la grata experiencia de tomarlo e intentarlo traducir al idioma de los adolescentes en un secundario de un lugar de merlo del Gran Buenos Aires (Cono Urbano Buenos Aires). Y le llamaba "vergüenza".
Linda sorpresa cuando uno de los chicos en uno de los papelitos puso que le había gustado mucho eso de la "Berguenza". Ya fue muy bueno que se animara a expresarlo y escribirlo ¿verdad?
La vergüenza es una herramienta natural de defensa. Y la estamos forzando.
Existe un cierto instinto en los chicos, en los adolescentes. Hay un lenguaje donde se conecta.
Este nº 282 viene después de lo que leíamos el miércoles anterior 281.
Después de todo este meteorito, después de toda esta sobrecarga descontrolada, de toda esta pornografía, de esta invasión de propuestas, de todo este bombardeo de mensajes, de todos estos impactos, influencias.
Estamos bien hechos, no somos seres indefensos. Hay herramientas tambien en nosotros, en las personas, que llega, que está llegando para sobrevivir, para que el amor no se extinga en nosotros. Hay medios. Aunque como dice el nº 282 "algunos consideren que es una cuestión de otras épocas".
Sin el pudor, podemos reducir el afecto y la sexualidad a obsesiones que nos concentran sólo en la genitalidad, en morbosidades que desfiguran nuestra capacidad de amar y en diversas formas de violencia sexual que nos llevan a ser tratados de modo inhumano o a dañar a otros".
El último de los ciclos que dimos: "el de los amores lastimados o amores patológicos", incluía el tema de los noviazgos violentos. Una cosa va de la mano de otra.
Tal vez todo los más vulnerables: niños, adolescentes, pobres están reaccionando a una sociedad de EXCESOS.
Estamos en un cambio epocal, en un tsunami en el que estamos insertos.Pero en una sociedad hiper consumista . Consumir, ¿el qué? no importa, lo que sea. Exceso, de todo. CONSUMISMO. Consumo, ¿de qué? de lo que sea.
283. Con frecuencia la educación sexual se concentra en la invitación a «cuidarse», procurando un «sexo seguro». Esta expresión transmite una actitud negativa hacia la finalidad procreativa natural de la sexualidad, como si un posible hijo fuera un enemigo del cual hay que protegerse. Así se promueve la agresividad narcisista en lugar de la acogida. Es irresponsable toda invitación a los adolescentes a que jueguen con sus cuerpos y deseos, como si tuvieran la madurez, los valores, el compromiso mutuo y los objetivos propios del matrimonio. De ese modo se los alienta alegremente a utilizar a otra persona como objeto de búsquedas compensatorias de carencias o de grandes límites. Es importante más bien enseñarles un camino en torno a las diversas expresiones del amor, al cuidado mutuo, a la ternura respetuosa, a la comunicación rica de sentido. Porque todo eso prepara para un don de sí íntegro y generoso que se expresará, luego de un compromiso público, en la entrega de los cuerpos. La unión sexual en el matrimonio aparecerá así como signo de un compromiso totalizante, enriquecido por todo el camino previo".
El deseo es siempre ilimitado, desea, desea... desea lo infinito porque desea a Dios, desea el reino, y nunca se saciará con lo finito. Lo finito es incapaz de saciarlo.
Por eso FELICES LOS POBRES. En palabras de Madeleine Delbrel (mística, poeta y asistente social Francesa)
"Bienaventurados los pobres de espíritu"
Ser pobre no es interesante:
todos los pobres son de esta opinión.
Lo interesante es poseer el Reino de los Cielos, pero solo los pobres lo poseen.
Así que no penseís que nuestra alegría consiste en pasar nuestros días vaciando nuestras manos,
nuestras cabezas y nuestros corazones
al Reino de los Cielos que pasa.
Pues es asombroso saberlo tan próximo,
saber que Dios está tan cerca de nosotros;
es prodigioso saber que su amor es posible
de tal manera en nosotros y sobre nosotros.
y no abrirle la puerta unica y simple,
de la pobreza de espíritu....
